La calidad de la instalación de los suelos deportivos de madera influye directamente en su rendimiento y vida útil, y la preparación previa a la instalación es crucial para garantizar la calidad.
En primer lugar, se deben completar las obras de ingeniería civil. El suelo debe estar completamente limpio, libre de residuos y polvo, y la calidad de la construcción debe cumplir estrictamente con las especificaciones de diseño arquitectónico. Los residuos en el suelo pueden causar desniveles durante la instalación, lo que afecta al efecto general y a la experiencia del usuario. Los suelos que no cumplen con los requisitos de diseño pueden presentar problemas de planitud y capacidad de carga, lo que los hace inadecuados para proporcionar una base estable y fiable para los suelos deportivos de madera.
En segundo lugar, el proceso de instalación debe completarse. Los sistemas de fontanería, electricidad, gas y ventilación interiores deben estar instalados y probados a presión para garantizar su correcto funcionamiento y no afectar al suelo de madera. Por ejemplo, si las tuberías de agua presentan fugas después de la instalación, estas pueden causar humedad, deformación y deformación. Una instalación eléctrica incorrecta puede dañar el suelo instalado durante reparaciones posteriores.
Además, se debe evitar en la medida de lo posible la construcción cruzada. Si circunstancias especiales requieren la superposición de obras, se requiere una consulta multipartita para aclarar las responsabilidades y establecer la documentación escrita. Esto garantiza una clara identificación de responsabilidades en caso de que surjan problemas durante la construcción, evitando la imposición de responsabilidades y retrasos. También garantiza que cada etapa de la construcción se desarrolle de forma ordenada, evitando interferencias que podrían afectar la calidad de la instalación del suelo deportivo de madera.
Finalmente, el control de la humedad es crucial. Tanto la humedad del suelo como la atmosférica deben ser acordes con los requisitos de contenido de humedad del suelo. Generalmente, el contenido de humedad de los suelos deportivos de madera debe controlarse estrictamente dentro de un rango determinado, por ejemplo, del 6 % al 8 %. Una humedad del suelo o atmosférica excesivamente alta o baja puede causar deformaciones durante el uso debido a los cambios en el contenido de humedad. Por ejemplo, instalar el suelo en un ambiente húmedo puede provocar que se contraiga y agriete durante el secado posterior; instalarlo en un ambiente seco puede provocar que se expanda y deforme al exponerse a una mayor humedad. Solo cumpliendo estos requisitos de construcción se puede sentar una base sólida para una instalación fluida y un rendimiento óptimo de los suelos deportivos de madera.