La limpieza diaria de los suelos de madera deportiva es crucial para mantener su rendimiento óptimo y prolongar su vida útil. Un pequeño descuido puede dañar el suelo y afectar su usabilidad.
Al realizar la limpieza diaria, lo más importante es elegir las herramientas de limpieza adecuadas. Se recomienda eliminar regularmente el polvo y los residuos del suelo con una escoba o aspiradora limpia de cerdas suaves. Nunca utilice cepillos metálicos ni herramientas duras. Si bien los suelos de madera deportiva son algo resistentes al desgaste, pueden rayar fácilmente la superficie y dañar el acabado, lo que no solo afecta su estética, sino que también reduce sus propiedades protectoras y los hace más susceptibles a las manchas y al desgaste.
También es necesario fregar regularmente, pero controlando la humedad. Utilice una mopa ligeramente húmeda para limpiar el suelo, pero asegúrese de que no esté demasiado húmeda. La humedad que se filtra en las grietas del suelo y se acumula con el tiempo puede causar deformaciones y moho. Además, utilice un limpiador de suelos específico y evite los limpiadores ácidos o muy alcalinos. Dado que los suelos deportivos de madera están hechos principalmente de madera, los limpiadores ácidos o fuertemente alcalinos pueden reaccionar químicamente con la madera, dañando su estructura y acortando su vida útil. Es importante evitar el uso de productos a base de cera o aceite en suelos deportivos de madera. Estos pueden crear una capa grasosa en la superficie, lo que contradice la necesidad de buenas propiedades antideslizantes. Esto puede aumentar el riesgo de resbalones durante el ejercicio y suponer un riesgo para la seguridad de los atletas. Por lo tanto, se recomienda utilizar limpiadores a base de agua para la limpieza, ya que limpian eficazmente el suelo y garantizan que las propiedades antideslizantes se mantengan intactas.
Las manchas difíciles deben tratarse con prontitud. Limpie inmediatamente con un paño limpio y húmedo. Para manchas más difíciles, se puede utilizar un detergente suave para un tratamiento delicado. Sin embargo, tenga cuidado de no utilizar paños ásperos ni limpiadores químicos demasiado agresivos, ya que pueden rayar el suelo, mientras que los limpiadores químicos demasiado agresivos pueden corroer y dañar la superficie. Siguiendo estos puntos clave en su rutina de limpieza diaria, podrá ma