El mantenimiento diario de los suelos deportivos de madera es fundamental para mantener su buen rendimiento y prolongar su vida útil.
La limpieza es fundamental. Dado que los suelos deportivos de madera acumulan polvo, manchas y sudor durante su uso, es fundamental limpiarlos con regularidad. Para la limpieza, utilice primero una escoba suave o una aspiradora para eliminar los residuos y el polvo más grandes y evitar arañazos durante la limpieza posterior. Para manchas difíciles, utilice un limpiador profesional para suelos deportivos de madera. Este tipo de limpiador está especialmente formulado para eliminar eficazmente las manchas sin dañar la pintura ni el material del suelo. No utilice limpiadores domésticos, aceite para fregar, agua con cera ni desinfectantes, ya que pueden contener ingredientes corrosivos que corroerán el revestimiento del suelo, haciendo que se vuelva pegajoso y pierda su brillo, e incluso afectando su rendimiento antideslizante.
El encerado también es un método importante para el mantenimiento de los suelos deportivos de madera. A medida que aumenta el tiempo de uso, la película de pintura sobre la superficie del suelo deportivo de madera se desgasta gradualmente y pierde brillo. Un encerado oportuno puede formar una película protectora sobre la superficie del suelo, que no solo restaura el brillo, sino que también mejora su resistencia al desgaste y a las manchas. La frecuencia de encerado se determina según el uso y el desgaste del suelo. Por lo general, los lugares de uso frecuente pueden encerarse cada 3 a 6 meses; los lugares con menos uso pueden extender el ciclo de encerado. Antes de encerar, asegúrese de que la superficie del suelo esté limpia y seca. Durante el proceso de encerado, aplique la cera líquida uniformemente y utilice herramientas profesionales para pulir, de modo que la capa de cera se adhiera de forma uniforme y firme a la superficie del suelo. Es fundamental revisar regularmente las juntas de dilatación del suelo. La madera se caracteriza por la expansión y contracción térmica. El tamaño de los suelos deportivos de madera varía según la estación del año y la humedad ambiental. La presencia de juntas de dilatación permite que el suelo se expanda y contraiga. Si las juntas de expansión están obstruidas por polvo y residuos, el piso se verá obstaculizado al expandirse, lo que puede causar deformaciones, arqueamientos y otros problemas. Por lo tanto, es necesario revisarlas periódicamente, limpiar los residuos a tiempo y asegurarse de que no tengan obstrucciones.