Para determinar la calidad de un suelo deportivo de madera, se deben considerar varios indicadores fundamentales de rendimiento. En primer lugar, está la tasa de absorción de impactos, que las normas internacionales exigen entre el 53 % y el 70 %.

Una tasa demasiado alta dará una sensación de suavidad, mientras que una tasa demasiado baja puede provocar fácilmente lesiones deportivas. En segundo lugar, está la tasa de rebote del balón; un suelo de alta calidad debe superar el 90 % para garantizar trayectorias estables en deportes de balón como el baloncesto. En tercer lugar, está el coeficiente de fricción por deslizamiento, idealmente entre 0,4 y 0,6, que proporciona resistencia al deslizamiento y facilita las paradas repentinas y los cambios de dirección. Además, la deformación vertical (2,3-5,0 mm) y la tasa de retorno de energía (≥50 %), que afectan directamente la experiencia de despegue y aterrizaje del atleta. Estos datos no son aislados, sino que están interconectados. Por ejemplo, una alta absorción de impactos suele conllevar un menor retorno de energía, lo que requiere un equilibrio entre seguridad y rendimiento. Organismos de certificación profesionales (como DIN en Alemania y FIBA) certificarán todo el sistema de suelo. Al comprar, no se fije solo en la apariencia; Solicite siempre un informe de pruebas de terceros para asegurarse de que se cumplan todos los estándares de rendimiento.

