Las especificaciones para suelos deportivos de madera no son uniformes, pero pueden ajustarse con flexibilidad según el propósito, el presupuesto y las condiciones de instalación del recinto. El grosor estándar del panel suele ser de 22 mm

el ancho de 60-90 mm y el largo de 900-2200 mm. Por ejemplo, los tamaños comunes de los paneles de arce son de 22 × 75 × 1800 mm. La separación entre las vigas suele ser de 400-600 mm, y la sección transversal principal de la viga suele ser de 50 × 70 mm o mayor.
Para recintos de competición profesional, se recomienda una estructura fija de doble viga, con paneles machihembrados entrelazados para una mayor estabilidad general. Para recintos escolares o comunitarios, es preferible un sistema flotante o de una sola viga, que ofrece menores costos y una instalación más rápida. Además, los colores (como madera natural, nogal oscuro, roble claro), los tratamientos de superficie (laca UV, laca al agua) y los diseños de logotipos se pueden personalizar para satisfacer necesidades específicas.
Es importante tener en cuenta que se deben colocar juntas de dilatación (generalmente de 8 a 15 mm) en el suelo para evitar deformaciones por expansión y contracción térmica. Asimismo, la humedad del local debe controlarse entre el 40 % y el 60 %, y la temperatura entre 15 y 30 °C para garantizar un rendimiento duradero. Tanto si se trata de una configuración estándar como de una personalización, debe realizarse bajo la supervisión de un diseñador profesional para garantizar que se tengan en cuenta tanto la funcionalidad como la estética.

