En el campo de los suelos deportivos de madera, la durabilidad del material es un factor clave para medir su calidad. Entre muchos materiales, el arce y el roble destacan en cuanto a durabilidad debido a sus propias características.
El arce, especialmente el arce norteamericano, es muy apreciado. Su estructura de madera es uniforme y densa, con dureza moderada, lo que le confiere buena elasticidad y resistencia al desgaste. Los pisos deportivos de madera de arce son una opción común en los estadios de la NBA. Tomemos como ejemplo el Chase Center, la cancha local de los Warriors. El piso de madera de arce del recinto ha resistido durante mucho tiempo la prueba de las competiciones de alta intensidad. Los jugadores corren, saltan, se detienen y giran con frecuencia en la cancha, y el piso está sujeto a tremendos impactos y fricción. Sin embargo, el suelo sigue teniendo un buen rendimiento a lo largo de los años y puede durar hasta 15-20 años. Esto se debe a la estructura celular apretada de la madera de arce, que puede resistir eficazmente el desgaste causado por el movimiento diario y no es propensa a problemas como el desgaste y la deformación.
El roble también es conocido por su durabilidad. Tiene alta dureza, fibras de madera resistentes, alta densidad y puede soportar mayor presión. En comparación con el arce, el roble es más asequible y es una opción ideal para lugares con presupuestos limitados pero que buscan durabilidad, como gimnasios escolares, centros de fitness comunitarios, etc. Aunque el roble es ligeramente inferior en apariencia y elasticidad, su durabilidad es suficiente para satisfacer las necesidades de los deportes regulares. En un gimnasio de secundaria, el piso de madera de roble para deportes aún se encuentra en buenas condiciones después de años de uso frecuente por parte de los estudiantes en actividades deportivas diarias, incluido el baloncesto, el bádminton y otros deportes. Con un uso normal, su vida útil puede alcanzar los 10-15 años.