Diferencias entre arce, roble y haya: El arce, el roble y el haya son los tres materiales más populares para suelos deportivos. Si bien son maderas duras, difieren significativamente en sus propiedades, rendimiento y aplicaciones. Comprender estas diferencias puede ayudarle a elegir el material más adecuado para su recinto.
En cuanto a las propiedades del material, el arce tiene una densidad de secado al aire de aproximadamente 0,68 g/cm³ y una dureza moderada (dureza Brinell de aproximadamente 4200 N). Su fina textura, veta recta y uniforme, y la ausencia de nudos perceptibles le confieren una excelente elasticidad y tenacidad, lo que le permite recuperarse rápidamente de los impactos. Su superficie es muy plana y menos propensa a abolladuras o abolladuras. El roble tiene una mayor densidad de secado al aire de aproximadamente 0,76 g/cm³ y una dureza Brinell superior a 5000 N, muy superior a la del arce y una mayor resistencia al desgaste. Sin embargo, su tenacidad es relativamente menor, lo que lo hace propenso a agrietarse ante impactos fuertes. La densidad de la haya en secado al aire se sitúa entre ambas, con aproximadamente 0,72 g/cm³, y su dureza Brinell es de aproximadamente 4800 N. Su textura es ondulada, su estructura es compacta y su estabilidad es buena, pero su tasa de recuperación elástica es ligeramente inferior a la del arce.
En términos de rendimiento, el arce presenta la mayor tasa de recuperación elástica, superior al 90 %, y una tasa de absorción de impactos del 38 % al 45 %, cumpliendo plenamente los requisitos de la FIBA para suelos de canchas profesionales de baloncesto. Esto lo convierte en la opción preferida para recintos como canchas de baloncesto y voleibol