La resistencia al desgaste determina la vida útil de los suelos deportivos de madera. Factores clave incluyen la dureza del material de la superficie
el proceso de recubrimiento resistente al desgaste y la frecuencia de uso. La dureza Brinell se utiliza como estándar para la dureza del material: el arce tiene una dureza Brinell de ≥4500N, el roble ≥5000N y el roble ≥5500N. A mayor dureza, mayor resistencia al desgaste, lo que lo hace adecuado para instalaciones de uso frecuente. Maderas más blandas, como el fresno (dureza Brinell de 3500N) y el pino (3000N), son adecuadas para instalaciones de entrenamiento con menor frecuencia. Los recubrimientos resistentes a la abrasión son la segunda línea de defensa. Los principales métodos utilizados son la pintura resistente al desgaste UV y el aceite de cera para madera. La pintura resistente al desgaste UV se cura con luz ultravioleta, formando una capa transparente de 0,3-0,5 mm de espesor con una resistencia a la abrasión de ≥6000 revoluciones (el estándar nacional para uso doméstico es de 4000 revoluciones), lo que la hace adecuada para espacios expuestos a la fricción frecuente del calzado deportivo. El aceite de cera para madera penetra en la madera, creando un acabado mate y una resistencia a la abrasión de ≥3000 revoluciones, lo que la hace ideal para estudios de danza y otros lugares donde la comodidad del pie es crucial.
En cuanto a la vida útil, una combinación de madera dura de alta calidad y recubrimiento UV puede durar de 15 a 20 años con un mantenimiento normal; una combinación de madera blanda y aceite de cera para madera tiene una vida útil de aproximadamente 8 a 12 años. Durante el mantenimiento rutinario, evite rayar el recubrimiento con instrumentos afilados. Pula y encere el recubrimiento UV cada 2 o 3 años. Cuando el recubrimiento se desgaste, revelando el color natural de la madera, vuelva a lijar y barnizar para prolongar la vida útil del suelo.