Los suelos de madera para uso deportivo son un elemento vital de los recintos deportivos
y su mantenimiento está directamente relacionado con su vida útil, rendimiento y seguridad de los atletas. Dominar las técnicas adecuadas de mantenimiento puede mantener los suelos de madera para uso deportivo en óptimas condiciones.
La limpieza diaria es fundamental para el mantenimiento de los suelos de madera para uso deportivo. Se recomienda barrer al menos una vez por semana con una escoba limpia o una aspiradora para eliminar el polvo y los residuos del suelo. Esto evita que las partículas de polvo rocen con las suelas de los zapatos de los atletas durante el ejercicio y rayen la superficie del suelo. Una limpieza profunda regular también es esencial. Periódicamente, utilice equipos profesionales de limpieza de suelos de madera para una limpieza a fondo que elimine las manchas y arañazos difíciles. Al limpiar, utilice un detergente suave y evite detergentes que contengan ácidos o bases fuertes para no dañar el acabado del suelo.
La limpieza de las esquinas es igualmente importante. El polvo y los residuos se acumulan fácilmente en rincones como las rejillas de ventilación del suelo, las juntas de dilatación y las zonas donde se instalan calefactores y equipos deportivos. Una limpieza regular es esencial para evitar obstrucciones. Aspirar o usar un compresor de aire puede ayudar a mantener estas áreas limpias y despejadas, garantizando que el piso respire y se expanda correctamente, y evitando que se acumulen residuos que afecten su estabilidad. Controlar la humedad es crucial para el mantenimiento de los pisos de madera deportiva. Mantener un rango adecuado de humedad interior, generalmente entre el 40 % y el 60 %, es crucial. La baja humedad puede causar que los pisos de madera se sequen y agrieten, mientras que la alta humedad puede deformarlos. Instale un humidificador o deshumidificador para regular la humedad interior. Además, mantenga las puertas y ventanas cerradas durante el clima húmedo para evitar que entre humedad en la habitación. En clima seco, aumente la humedad interior según corresponda.