La limpieza y el mantenimiento diarios de los suelos deportivos de madera son esenciales para mantener su buen rendimiento y prolongar su vida útil.
Para la limpieza diaria, utilice una escoba de cerdas suaves o una aspiradora para eliminar el polvo y la grava de la superficie a diario. Estos residuos no solo afectan la apariencia, sino que también desgastan el suelo. Después, limpie con una mopa húmeda que no gotee para evitar la retención excesiva de agua y evitar que el suelo se deforme o deforme. En recintos con mucha actividad física, se debe aumentar la frecuencia de limpieza para garantizar que no queden manchas ni residuos de sudor en la superficie.
Está estrictamente prohibido utilizar métodos de limpieza inadecuados. Los suelos deportivos de madera no deben encerarse. Aunque el encerado puede abrillantarlos, reduce el coeficiente de fricción de la superficie y aumenta el riesgo de resbalones de los atletas. No se deben utilizar productos de aceite a base de disolventes para la limpieza, ya que pueden dañar la pintura del suelo. Elija un limpiador especial para suelos de madera que pueda eliminar la suciedad eficazmente sin dañar la madera.
La limpieza y el mantenimiento a fondo regulares también son indispensables. Se pueden utilizar soluciones de limpieza profunda y fregadoras de suelos para una limpieza general que elimine manchas y arañazos difíciles. Al mismo tiempo, se pueden realizar tratamientos de mantenimiento como la reparación de arañazos, pintura, encerado y pulido para restaurar el brillo del suelo y prolongar su vida útil. En instalaciones deportivas de uso frecuente y con gran afluencia de público, se recomienda realizar una limpieza profunda y un mantenimiento simultáneos.
Es fundamental controlar el entorno. Los suelos de madera son sensibles a la humedad. Tienden a expandirse cuando la humedad es demasiado alta y a contraerse al secarse. La humedad del recinto debe mantenerse entre el 35 % y el 65 %, y la temperatura debe mantenerse entre 18 °C y 24 °C. Se puede utilizar un humidificador para aumentar la humedad en la estación seca, y abrir las ventanas para ventilar o utilizar un equipo deshumidificador en la estación húmeda.
Hay algunos detalles a tener en cuenta en el uso diario. Evite caminar sobre el suelo de madera con tacones altos o zapatos con objetos afilados para evitar arañazos permanentes. Limpie con frecuencia las esquinas muertas, como las rejillas de ventilación del suelo y las juntas de dilatación, para evitar la acumulación de polvo que causa moho e insectos. Además, se debe impartir capacitación periódica al personal del recinto sobre el mantenimiento de suelos de madera para mejorar su nivel. Los suelos deportivos de madera se pueden mantener eficazmente mediante una limpieza rigurosa, un mantenimiento regular, el control ambiental y la atención al detalle.