La vida útil de los suelos deportivos de madera depende no solo de la calidad del producto y la mano de obra durante la instalación, sino también del mantenimiento rutinario. Muchos recintos, al carecer de conocimientos profesionales, suelen cometer errores de mantenimiento, lo que provoca desgaste prematuro, deformación y agrietamiento. Esto no solo afecta la experiencia del usuario, sino que también aumenta significativamente los costes de reparación. A continuación, se presentan tres de los errores de mantenimiento más comunes en el sector y sus soluciones correctas.
Error 1: Enjuagar o fregar el suelo directamente con agua
Algunos recintos, por comodidad, simplemente enjuagan el suelo con agua o lo fregan con agua húmeda. Esto permite que la humedad penetre en el suelo y desestabilice el material base. Los suelos deportivos de madera maciza se fabrican con varias capas de madera laminada. Una vez que absorben agua, los diferentes coeficientes de expansión de las capas los hacen propensos a deformarse y deslaminarse. Además, la humedad puede corroer el acolchado de la base, reduciendo su capacidad de absorción de impactos.
El enfoque correcto: La limpieza diaria debe realizarse combinando fregado en seco y semiseco. Primero, use una aspiradora o un paño seco para eliminar el polvo y los residuos de la superficie. Luego, limpie con una mopa bien escurrida (con una humedad no superior al 30%). Use un detergente neutro (como un limpiador específico para pisos de madera) para fregar, evitando detergentes ácidos o alcalinos que pueden dañar el acabado. Se puede realizar una limpieza profunda mensualmente con una máquina limpiadora especializada para pisos de madera y una almohadilla de limpieza ligeramente húmeda para eliminar completamente las manchas sin dejar humedad residual.
Miedo erróneo 2: Descuidar el encerado y la reparación regular del acabado
El acabado de los pisos deportivos de madera es la primera línea de defensa. Con el tiempo, el acabado se rayará y desgastará debido a la fricción y los impactos. Si no se repara a tiempo, la humedad y las manchas pueden penetrar a través de estos arañazos en el material base, acelerando el envejecimiento del piso. Sin embargo, muchos locales creen que «cuanto más encerado, mejor». Encerar con frecuencia puede provocar la acumulación de acabado, lo que afecta las propiedades antideslizantes y la elasticidad del piso. El enfoque correcto: desarrollar un programa de encerado basado en la frecuencia de uso. Las instalaciones de competición profesional deben encerarse cada tres meses, y las de entrenamiento cada seis meses. Antes de encerar, limpie a fondo la superficie del suelo para eliminar cualquier resto de cera y manchas. Utilice una cera específica para suelos de madera deportiva (como cera de PTFE), aplíquela uniformemente y luego pula con una pulidora para asegurar la formación de una película protectora uniforme sobre la superficie de la pintura. Los arañazos pequeños pueden repararse con un rotulador de retoque específico. Los arañazos más profundos o el desgaste considerable de la pintura requieren un pulido y repintado especializados.