El pino, una madera blanda común, aunque no tan dura como el arce o el roble, se ha ganado un nicho en el mercado de los suelos deportivos gracias a su excelente rendimiento ambiental y económico. Se utiliza principalmente en gimnasios, estudios de yoga, gimnasios infantiles y otros recintos deportivos con requisitos de dureza relativamente bajos.
El pino ofrece ventajas ambientales naturales. La madera en sí no contiene sustancias nocivas y su proceso de producción no requiere tratamientos químicos complejos. Esto reduce eficazmente la liberación de gases nocivos como el formaldehído, cumpliendo así con los requisitos ambientales y de salud de los recintos deportivos modernos. Los gimnasios infantiles, en particular, exigen una seguridad ambiental extremadamente alta. Los suelos deportivos de pino proporcionan un entorno seguro y libre de toxinas para los niños, protegiéndolos de sustancias nocivas que podrían perjudicar su salud. Además, la veta fina del pino, su elegante color y su aroma natural a madera crean un ambiente cómodo y relajante, ideal para actividades relajantes como el yoga y el pilates.
En términos económicos, el pino tiene un ciclo de crecimiento corto, es abundante y su precio es significativamente inferior al de la madera dura, lo que reduce significativamente el coste de la construcción de recintos deportivos. Para recintos con presupuestos limitados y actividades de baja intensidad, como gimnasios comunitarios y salas de yoga escolares, los suelos deportivos de pino son una opción extremadamente rentable. Si bien la madera de pino es relativamente dura, su rendimiento se puede mejorar eficazmente mediante un diseño estructural y un tratamiento superficial adecuados. Por ejemplo, el uso de múltiples capas de contrachapado macizo como capa base mejora la estabilidad, mientras que la aplicación de un revestimiento de poliuretano de alta resistencia y resistente al desgaste sobre la superficie mejora la resistencia al desgaste, lo que hace que los suelos deportivos de pino sean adecuados para el uso deportivo diario.
Además, la madera de pino ofrece una excelente trabajabilidad, es fácil de cortar y empalmar, y se puede personalizar con flexibilidad para adaptarse a las dimensiones del recinto. El corto ciclo de construcción reduce significativamente el tiempo de construcción del recinto. Además, los suelos deportivos de pino requieren poco mantenimiento, ya que solo requieren una limpieza y un mantenimiento diarios sencillos para mantenerlos en excelentes condiciones y un uso a largo plazo.