La humedad y el moho en los suelos deportivos de madera no solo afectan su aspecto, sino que también dañan su estructura e incluso producen sustancias nocivas que amenazan la salud humana. Para solucionar este problema, es importante identificar primero la causa de la humedad y, posteriormente, implementar medidas de tratamiento científicas.
La humedad y el moho pueden aparecer debido a dos factores principales. El primero son los factores ambientales. La alta humedad crónica en el recinto o la impermeabilización inadecuada del subsuelo permiten que la humedad del subsuelo penetre en el suelo, humedeciendo la madera. Si una fuga en el recinto, como una gotera en el techo o una tubería rota, no se soluciona a tiempo, el suelo puede permanecer húmedo durante largos periodos, lo que provoca la aparición de moho. El segundo es el mantenimiento inadecuado. El uso excesivo de agua durante la limpieza o la falta de limpieza del agua acumulada en la superficie del suelo permiten que la humedad se filtre por las grietas y el interior del suelo, causando gradualmente moho.
Si el suelo está húmedo y mohoso, es necesario un tratamiento inmediato. En primer lugar, mantenga una buena ventilación en el recinto abriendo puertas, ventanas y extractores de aire para reducir la humedad. Si el moho es leve, limpie la zona afectada con un paño seco. Luego, rocíe la zona afectada con un inhibidor de moho especial para pisos de madera. Déjelo actuar un rato, luego límpielo con agua limpia y deje que el piso se seque al aire. Si el moho es severo, con secciones del piso negras y podridas, primero retire el piso dañado, limpie la humedad y el moho del piso base, y séquelo y desinféctelo. Use un deshumidificador para acelerar el secado o aplique pintura antimoho. Una vez que el piso base esté completamente seco, reemplace el piso nuevo. Durante la instalación, asegúrese de colocar una membrana impermeable entre el piso y el piso base para mejorar la resistencia a la humedad.