Material de suelo deportivo de madera

El rendimiento de los suelos deportivos de madera depende en gran medida del material utilizado. Los diferentes materiales aportan características distintivas para satisfacer las diversas necesidades de los distintos recintos deportivos.

La madera maciza ocupa un lugar destacado en el mercado de los suelos deportivos de madera. El arce se considera el material estrella para suelos deportivos de madera maciza. El arce es una madera dura de alta densidad, lo que le confiere una excepcional resistencia al desgaste. En deportes de alta intensidad como el baloncesto y el voleibol, los atletas suelen correr, saltar y detenerse bruscamente. La intensa fricción entre las suelas de los zapatos y el suelo ejerce una gran presión sobre la resistencia al desgaste del suelo. El arce soporta esta presión con facilidad, manteniendo su superficie en buen estado incluso después de un uso prolongado. El arce también posee una excelente elasticidad. Cuando los atletas saltan y aterrizan, los suelos de arce absorben eficazmente el impacto y convierten parte de la energía en rebote ascendente, lo que ayuda a los atletas a rendir mejor. Su hermosa veta y color natural aportan una estética única a los recintos deportivos, mejorando su aspecto y comodidad.

El roble también es un material común para suelos deportivos de madera maciza. Es duro, posee una excelente resistencia a la compresión y estabilidad. Puede soportar el impacto de objetos pesados y el impacto de alta intensidad de los atletas, manteniendo una estabilidad excepcional. La veta única del roble crea una sensación de calma y elegancia, lo que lo hace ideal para instalaciones deportivas donde la estética y la durabilidad son primordiales, como canchas de tenis profesionales y pabellones de esgrima.

Además de la madera maciza, la madera compuesta también se utiliza ampliamente en suelos deportivos. Los suelos de madera compuesta se construyen típicamente con múltiples capas de materiales laminados, generalmente madera contrachapada y tableros de fibra. Esta estructura permite que los suelos de madera compuesta conserven algunas de las características de los suelos de madera, a la vez que ofrecen una mayor estabilidad. En comparación con los suelos de madera maciza, son menos susceptibles a factores ambientales como la humedad y la temperatura, lo que los hace menos propensos a agrietarse y deformarse. Además, los suelos de madera compuesta son relativamente asequibles y fáciles de instalar, lo que los convierte en una opción popular para instalaciones con presupuestos ajustados, como escuelas y gimnasios comunitarios que requieren suelos deportivos de alta calidad.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio