Durante el uso a largo plazo, los suelos deportivos de madera son propensos a sufrir arañazos y desgaste debido a las suelas de los atletas, el movimiento frecuente de equipos deportivos y varios otros factores. Esto no solo afectará la apariencia del piso, sino que también reducirá el rendimiento y la seguridad del mismo.
Para solucionar el problema de rayones y desgaste en los pisos de madera deportivos lo primero que debemos hacer es tomar medidas preventivas. En el uso diario, el piso debe limpiarse y mantenerse periódicamente para mantener la superficie limpia y ordenada. Evite utilizar herramientas de limpieza ásperas, como lana de acero, que pueden rayar la superficie del piso durante el proceso de limpieza. Al mismo tiempo, se deben colocar señales visibles en las entradas de los recintos deportivos para recordar a los atletas y espectadores que deben cambiarse al calzado adecuado y evitar entrar a los recintos usando zapatos con objetos afilados.
En el caso de arañazos superficiales, las marcas se pueden reducir mediante limpieza y mantenimiento diarios. Utilice un paño suave húmedo con una cantidad adecuada de limpiador de pisos, limpie suavemente el área rayada y luego seque con un paño seco. Esto eliminará la suciedad y las impurezas de la superficie rayada, haciendo que el rasguño sea menos notorio. Además, también puedes utilizar algunos productos especiales para el cuidado del suelo, como cera para suelos, aceite esencial para suelos, etc., para cuidar el suelo. Estos productos pueden formar una película protectora sobre la superficie del piso, lo que no solo puede aumentar el brillo del piso, sino que también reduce el impacto de los rayones.
Para rayones más profundos, necesitará recurrir a un restaurador de pisos de madera profesional para repararlos. Primero, elija el agente reparador adecuado según la profundidad y el ancho del rayón. Aplique el agente reparador uniformemente sobre el rayón, luego use un raspador u otra herramienta para rellenar el rayón con el agente reparador y dejarlo al ras de la superficie del piso. Después de aplicar el agente reparador, es necesario lijar, pulir y realizar otros tratamientos para restaurar el brillo y el rendimiento originales del piso. Preste atención a la fuerza y la dirección al lijar para evitar dañar el piso circundante. Para pulir se puede utilizar una pulidora profesional o herramientas de pulido manual para que la superficie del piso reparado quede más lisa.